Hablarse en positivo: Claves y beneficios

La manera en que te hablas moldea tu forma de verte, de actuar y de vivir. Las palabras que usas contigo misma pueden impulsarte o frenarte, sostenerte o agotarte.

Hablarte en positivo no es negar lo que sientes ni repetir frases vacías. Es elegir un lenguaje que te cuide y te acompañe, incluso cuando las cosas no van bien. Muchas veces es difícil hablarse de esta manera, ya que no siempre creemos las cosas positivas sobre nosotros mismos, incluso cuando alguien más lo dices parecemos incrédulos ante la idea. Hablarse en positivo hace que algo mágico ocurra incluso cuando nadie te dice nada lindo.

Por qué es importante hablarse en positivo

• Porque tus palabras crean tu realidad. Lo que repites constantemente se convierte en tu forma de pensar y de actuar.

• Porque cambia tu diálogo interno. Una voz amable reemplaza a la crítica que te sabotea.

• Porque mejora tu bienestar emocional. Pensar y hablar en positivo activa la calma, la motivación y la confianza.

• Porque fortalece la autoestima. No se trata de ser perfecta, sino de hablarte con respeto y empatía.

 Claves para practicar el diálogo positivo

1. Identifica cómo te hablas. Escucha tu voz interna. ¿Eres comprensiva o exigente contigo?

2. Reformula tus pensamientos negativos. Cambia el “no puedo” por “voy a intentarlo paso a paso”.

3. Usa afirmaciones que te sostengan, no que te presionen. Ejemplo: “Estoy aprendiendo”, “Puedo mejorar”, “Estoy haciendo lo mejor que puedo hoy”.

4. Practica la gratitud diaria. Agradecer lo pequeño cambia la forma en que miras lo cotidiano.

5. Rodéate de un lenguaje amable. Personas, libros y espacios que te inspiren también alimentan tu voz interna.

 Ejercicio para conectar contigo

Toma una hoja y escribe tres frases que sueles decirte cuando te equivocas o algo no sale bien. Luego cámbialas por versiones más amables y realistas.

Por ejemplo:

• “Soy un desastre” → “Estoy aprendiendo y eso toma tiempo.”

• “Nunca me sale bien” → “Puedo mejorar si sigo practicando.”

• “No soy suficiente” → “Ya soy suficiente por intentarlo cada día.”

El cambio comienza con una sola frase que decidas transformar.

 En palabras sinceras…

Hablarte con amor no es debilidad, es inteligencia emocional. Es reconocer que la forma en que te tratas determina la relación más importante de tu vida: la que tienes contigo.
Eres tu propia compañía permanente. Cuídala con tus palabras.

Si llegaste hasta aquí…

Tal vez hoy puedas decirte algo distinto: “Lo estoy haciendo bien, incluso si el resultado aún no se ve.” Porque cada palabra amable que te dedicas es un paso hacia una versión más fuerte y compasiva de ti.

¿Qué frase positiva podrías decirte hoy? Te leo en los comentarios

Un abrazo

Pam